
Qué más si no el tiempo, nos educa y muestra las verdades de la vida, nos niega creencias pasadas o nos afirma nuevas, nos transforma a cada paso que damos, crecemos por su rastro.
En muchos casos deseamos que venga y nos salve para lograr olvidar un presente, pero el tiempo no es más que el vivir: tiempo esclavo de nuestros actos, o ellos conformándolo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario